De nuevo, un grupo de 12 personas ha contactado con nosotros para que los ayudemos a conocer y aproximarse al mundo del vino. Las catas son el mejor modo de aprender y vivir de primera mano todo lo que supone el vino: la elaboración, el tipo de uva, el olfato, el gusto y lo más importante, si lo encontramos bueno o exquisito.
La sumiller que les guió fue Anna Vicens, de la D. O. Empordà.

Las razones que nos llevaron a escoger el Empordà son básicamente dos:
– La primera, es la proximidad, queremos dar a conocer un terreno y una historia que nos son muy cercanos, pero a la vez desconocidos.
– La segunda, los vinos. Los Vinos del Empordà tienen personalidad propia, y actualmente están en plena efervescencia y van ganando, día a día, mucho reconocimiento.
Las bodegas escogidas para esta cata fueron:
Capmany
La cultura vitivinícola del Grup Oliveda se remonta 3 generaciones atrás, para levantar una bodega enorme con un carácter y personalidad muy marcados. Propios del Empordà. Tiene viñas en Capmany, Vilamaniscle, Rabós y Garriguella. Todas ellas cerca, muy cerca del Parque Natural del Cap de Creus y de la Sierra de la Albera.
Son zonas muy influenciadas por la Tramuntana que ayudan a obtener un vino de «terroir» realmente magnífico. Cada uno de los viñedos cultiva unas variedades distintas y producen distintos tipos de vinos: blancos, tintos, rosados, cavas y espumosos.
Sant Climent Sescebes
La cultura familiar del Celler Martí Fabra está dejando un legado espectacular en la zona del Empordà. La bodega se remonta hasta el año 1305, por lo que la historia de esta es muy antigua, igual que la masía que aún se encuentra en sus tierras.
Los viñedos crecen a los pies de la Sierra de la Albera. Intentan cultivar la vid de la manera más respetuosa posible con la intención de mantener una buena riqueza del suelo y un gran equilibrio ecológico y sostenible.
Rabós
Se trata de una bodega pequeña, artesanal y de producción limitada. Su principal objetivo es producir un producto de grandísima calidad con las variedades autóctonas más representativas de estas tierras.
Las viñas del Cellrs d’en Guilla se encuentran en la plana de Garriguella y tienen entre 30 y 50 años de historia. Además ofrecen visitas guiadas a todo su entorno.
Mollet de Peralada
Lavinyeta es una bodega con un origen que se remonta a 2002, cuando adquirió un par de viñas de Samsó y Garnacha. A través de nuevas plantaciones y la construcción de una bodega en 2006, han consolidado su proyecto y se han posicionado como una de las bodegas con producción integrada de productos agroquímicos compatibles con el medioambiente.
El equipo de Lavinyeta es innovador y ofrece una variedad de actividades abiertas al público, como visitas guiadas, catas de vinos, talleres de cocina con productos producidos en la empresa, y actividades para empresas. Sus instalaciones también están adaptadas para acoger eventos de negocios.
Colera
El Celler Hugas de Batlle es muy respetuoso con su entorno, las tradiciones y el medioambiente. Se encuentran en Colera, en pleno Cap de Creus, un territorio único y realmente precioso. Entre el mar y las montes del límite del Cap de Creus. Consiguen producir unos vinos del Empordà realmente buenos y de calidad muy elevada. La climatología, buen hacer e innovaciones del Empordà han ido consiguiendo crecer para hacerse un hueco entre las denominaciones de más renombre de Cataluña y España.
Celler Martí Fabra
Cariñena Blanca, Cariñena Roja, Picapoll, Garnacha Gris y Garnacha Blanca
Actualmente ya no disponemos de estos vinos, aunque en el momento de la cata se probaron:
– Vinya del Metge 2013
Rosado. Fresco, muy agradable.
– Rec de Brau 2012
Tinto, potente de color y sabor.
Con estos vinos hemos hecho una pincelada por la D. O. Empordà, cada uno de ellos con sus rasgos personales, pero todos ellos tienen en común 4 elementos claves que caracterizan el Empordà : la vid, el mar, la montaña y la tramuntana.